Un largo camino a Cockpit- Cap. 2

¿Sabes cuando recibes una noticia que jamás esperas y además crees que nunca te tocara a ti?

Pues eso fue lo que sucedió.

Yo aún era un adolescente lleno de ideas y sueños por cumplir, como el ser piloto, pero la vida se había parado momentáneamente entre médicos y problemas, problemas familiares que vinieron con la enfermedad de mi madre.

Durante ese año yo cursaba 4 de la ESO, aún era un chaval, pero tenía claro que algún día volaría. Desgraciadamente ese año mi cabeza no estaba para estudiar ni mucho menos para pensar como seria el futuro porque me encontraba con un problema mucho mayor, la salud de mi madre (Para mi ella era todo desde que tengo uso de razón, recuerdo que le decía que no entendía como seria la vida sin ella, si se marchaba, pero ella contestaba que eso no sucedería).

Empecé a faltar mucho al instituto por lo que al acabar ese año mis padres decidieron que lo mejor era repetir ese curso escolar, lo más lógico que hicieron pensándolo hoy en día.

Sabía que ese año lectivo no había sido bueno, ni tampoco en lo personal, pero tenía claro que allí a lo lejos se encontraba mi sueño de ser piloto pero obviamente no era momento de pedir esa cantidad de dinero a mi familia con la situación que se estaba atravesando, así que decidí ese verano (acababa de cumplir 16 años) empezar a trabajar.

Conseguí trabajo en un restaurante de comida rápida, ese que antes había un payaso como imagen corporativa.

Era mi primer trabajo y yo tan solo tenía 16 años recién cumplidos, trabaje mucho, vamos que si trabaje ... Tenia varios compañeros que cuando les decía que trabajaba para ahorrar dinero y así conseguir ser piloto se reían en mi cara, sin duda fue un verano demasiado duro para poder ganar un sueldo que era realmente bajo, pero bueno, al menos tenía hamburguesas gratis.

Recuerdo una encargada, que nunca entendí porque me odiaba tanto, me mandaba siempre a limpiar el baño del restaurante, pero lo peor es que me decía:

-El piloto a limpiar los baños.

En una cosa ella no se equivocó, que al final me hice piloto...

Acabe esos meses de verano y deje de trabajar, volví a retomar mis estudios en la ESO para acabar cuarto grado.

Durante ese año fui el repetidor, sin importar el motivo por el cual había sucedido eso, saque buenas notas, pero mis profesores y muchos compañeros pensaban que tenía pájaros en la cabeza queriendo ser piloto, recuerdo que una profesora le dijo a mi padre que porque no me iba a estudiar un grado medio y dejaba de pensar en esa tontearía de ser piloto.

Acabe el curso con buenas notas y recuerdo que en la orla reproducían unas diapositivas con la foto de cada uno y la profesión que querían desarrollar, obviamente junto a mi foto ponía Piloto.

Decidí comenzar el bachillerato de ciencias, pero a la vez necesitaba juntar más dinero, así que comencé a trabajar en una tienda de telefonía en el departamento de gestión de empresas, trabajaba por el día y estudiaba el bachillerato por la noche.

Mi vida estaba ocupada 24/7, estudiar-trabajar y trabajar-estudiar.

A la vez la salud de mi madre mejoraba, mejoro tanto que ya los problemas de salud habían desaparecido del ámbito familiar.

Lo único malo fue que mis padres decidieron separarse, pero bueno, son cosas que pasan y ahí uno no se debe meter.

Yo volvía a enfocarme de lleno en mi objetivo, ahorrando y estudiando, también hacia algún vuelo virtual con un Boeing 757 o un CRJ, avión que acabaría volando como piloto.

Pero a todo esto le encontraba un GRAN problema, mi inglés era bastante malo así que necesitaba buscar opciones para mejorarlo ya que era imprescindible.

Estaba acabando un año donde se cerraba una etapa de varios años duros en nuestra familia, todo parecía volver a la calma y así continuar el camino hacia cockpit.

Llegaba navidad y yo estaba mirando con diferentes agencias la posibilidad de irme un año a estudiar y trabajar a UK para así mejorar mi inglés y tampoco dejar de ahorra dinero.

El día 5 de enero, justo la noche de reyes eran sobre las 20:00, yo estaba volando en mi Flight Simulator, como hacia siempre que tenía un rato libre además mis amigos se habían ido a la cabalgata de reyes con sus familias.

Suena mi teléfono y respondo,

Era mi familia con la noticia más dura que jamás puedes recibir, al otro lado del teléfono solo podía escuchar tristeza y lágrimas,

-Mamá se fue, ven rápido.

¿Sabes lo que es que el mundo se desmorone? ¿Qué sientas el vacío más grande que jamás puedes sentir?

Jamás corrí tan rápido, solo deseaba que todo fuese una pesadilla y despertar de ese mal sueño, pero no fue así.

La vida estaba nuevamente aquí dando de lleno, pero ahora sí, me había dando donde más me dolía.

Desde ese dia el cielo gano un ángel y cada vez que vuelo esta alli arriba. 

Continuara..